Esta vez, Tintín es enviado al Congo, la gran colonia belga de la época. Una serie de peripecias lo llevan al reino de los Babaoro'm, donde se convierte en el brujo honorario. Por una serie de circunstancias, termina enfrentado a una banda de gángsters asociados a Al Capone, los cuales quieren controlar la producción de diamantes del Congo. Naturalmente, él consigue detenerlos y deja el Congo poco después, nosotros tomamos su siguiente destino: América.



Este álbum es un documento excelente para ver cómo imaginaban los europeos de la época a África y a los africanos. La historia comenzó a publicarse el 5 de junio de 1930 en Le Petit Vingtième. El volumen fue rediseñado en colores en 1964, con lo que Hergé aprovechó para reformar ciertos detalles demasiado colonialistas. Sin embargo, este volumen pasó por un periodo de desgracia durante largos años.

En 1946, Hergé redibujó totalmente el álbum para pasarlo a color y reducir sus 110 planchas de origen a las 62 páginas que tendrían los álbumes en lo sucesivo. En esta nueva versión a color introdujo numerosas modificaciones, suavizando un poco los tintes colonialistas. A pesar de ello, Tintín en el Congo cayó en desgracia a partir de los años 50, y se hizo bastante difícil de encontrar. Era el conflictivo momento de la descolonización, y el álbum no era particularmente muy oportuno. Pero curiosamente fue en una revista del Zaire donde reapareció por primera vez la historia, acabando con la cuarentena de Tintín en el Congo.
No fue hasta 1970 cuando comenzó a encontrarse de nuevo más frecuentemente en las librerías.